Sus investigaciones en el campo del origen de patologías del cerebro y nuevas estrategias de tratamiento para enfermedades como la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), parkinson y alzheimer le valieron al científico chileno, el Dr. Claudio Hetz, profesor adjunto de la Escuela de Salud Pública de Harvard y experto en patologías del sistema nervioso, hacerse acreedor de premio internacional “Khwarizmi”, que cada año otorga la Organización de Investigación Iraní para la Ciencia y la Tecnología (IROST).
Este año postularon 594 investigadores de 47 países. El doctor Hetz recibió el primer lugar, compartido con Andreas Manz, de Suiza (a la izquierda) y Fu-Tong Liu, de Taiwán. Durante la ceremonia, el científico chileno se adjudicó además, un segundo reconocimiento especial de la Unesco por su contribución a la biomedicina mundial.
Este premio, en su vigésima octava versión, contempla una suma de 10 mil dólares, un recorrido por laboratorios del país islámico, además de charlas y encuentros científicos. La ceremonia de premiación contó con la presencia del presidente de Irán, Hasán Rouhaní, entre otras autoridades y miembros de múltiples organizaciones internacionales.
“Este premio es para hacer investigación en la Universidad de Chile y en nuestro Instituto de Neurociencia Biomedica (BNI), y es muy importante, puesto que es la primera vez que esta Fundación apoya la investigación en Latino América”, comenta el Dr. Claudio Hetz, quien también es codirector del Instituto Milenio de Neurociencia Biomédica, BNI.
Con la publicación de 15 papers al año, y una decena de proyectos de investigación a cuestas, Claudio Hetz, quien es también codirector del Instituto Milenio de NeurocienciaBiomédica y uno de los directores de la Fundación Neurounion, lidera estudios sobre el origen de patologías al cerebro y nuevas estrategias de tratamiento.
Estos avances, se focalizan en la comprensión de enfermedades neurodegenerativas como el parkinson, Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), alzheimer, y fundamentalmente, en cómo poder disminuir la muerte y daño en las neuronas afectadas por estos males.
Hetz hace hincapié de la importancia que reviste avanzar en estas áreas ya que según estadísticas de Neurounion “una de cada cinco personas sobre los sesenta años, corre el riesgo de desarrollar alguna enfermedad neurodegenerativa”.
Una de sus líneas de trabajo, relativas a ELA, se refiere al hallazgo de genes involucrados en el origen de esta patología, que ataca a células especializadas del sistema nervioso llamadas motoneuronas, provocando una parálisis muscular progresiva.
El científico descubrió que uno de los factores vinculados a su aparición es la mutación de unas proteínas llamadas “chaperonas”, responsables de eliminar “basura” dentro de las neuronas. “Dicha alteración estaría conduciendo a una serie de procesos que dañan a la neurona, y por ende, a la función muscular en las personas afectadas”, ha explicado el científico.
Estos estudios que también le significaron un galardón de la entidad suiza Frick Foundation, incluyen la secuenciación de ADN a cientos de pacientes con ELA, investigación que fue realizada en colaboración con el científico Robert Brown, de la Universidad de Massachusetts (EEUU).
El investigador señala que gracias a estos recursos, podrán seguir indagando en los nuevos factores genéticos que podrían aumentar la susceptibilidad y riesgo de padecer ELA. El galardón contempla fondos que ayudarán a avanzar en la materia durante los próximos dos años.